Tal vez seas de los (muchos) empresarios que piensen que por tener un negocio con establecimientos abiertos en la calle y que vende fundamentalmente a gente de la localidad, no necesitas una web. Pues bien, permíteme ser franco contigo: estás equivocado. Tu negocio local necesita una web.
Durante generaciones, los conceptos básicos del comercio minorista se mantuvieron igual: cuando alguien en una ciudad o pueblo quería comprar algo, simplemente tenía que ir a una tienda cercana y comprarlo.
Las tiendas, generalmente estaban situadas en las calles principales de esas poblaciones y la gente, aunque no supiera donde estaban, podía buscarlas por el letrero en su fachada. Además, dentro de su horario de apertura, podías ir cuando quisieras.
Pero, lamentablemente, el año 2020 ha supuesto una revolución y nos ha metido en el mundo digital a empujones, cambiando el paradigma de la proximidad física, por la proximidad real. Ya no está cerca lo que está a 10 minutos caminando o en coche. No, ahora cerca es lo que está al otro lado de la pantalla del ordenador, esté su establecimiento en la calle de al lado o esté en Pekín.
Pero volvamos al inicio; te invito a que te vuelvas a plantear la pregunta inicial…
¿Por qué mi negocio local necesita una web?
Bueno, ante todo, porque como te decíamos en este otro artículo, tu negocio necesita una web sí o sí, sea o no local.
Puede que pienses: «Pero si yo tengo una carnicería o una peluquería y solo vendo a gente de mi localidad, no vendo online… ¿Para qué necesito una web?». Pues déjame responderte: aunque solo vendas en tu localidad, si tienes una página web, facilitarás mucho las cosas a tus potenciales clientes y les acercarás mucho, justo al alcance de un clic.
Actualmente todo el mundo dispone de un móvil al alcance de la mano y del tiempo y la paciencia justas, así que cuanto más cerca estés del momento de su decisión, mucho mejor.
Si puedes mostrarle tu información, tus ventajas, tus puntos fuertes, tu catálogo de productos en la web, ya tienes un paso muy importante ganado… y si además les permites comprar o reservar tus productos o servicios desde allí mismo, pues tienes un punto enorme a tu favor frente a la competencia.
Bien, pues voy a darte unas cuantas razones por las que tu negocio local necesita una web.
#1 – Te encontrarán mucho más fácilmente
Hace bien poco tiempo, la gente acudía a ti a través del boca a boca o bien buscando en directorios locales, como las páginas amarillas.
Pero las guías telefónicas y similares son un objeto del pasado, que ya nadie utiliza. Piénsalo bien, ¿quién pasa ahora 10 minutos buscando en las 300 páginas de una guía telefónica, cuando puede decirle a su móvil «búscame la farmacia más cercana» y en 5 segundos tiene la respuesta?
¿Sabías que más del 50% de las búsquedas que se realizan en Google van referidas a empresas y negocios locales? Ubicación, productos, horario de apertura, reseñas de clientes…
El directorio local por excelencia ahora es Google My Business, que cuando buscas una empresa te dice no solo dónde está y las valoraciones de sus clientes. Te muestra una forma de contacto y, si tienen una web te la enlaza para que antes de decidirte a acudir, puedas hacerte una idea sobre ese negocio.
#2 – Controlarás la primera impresión de tus clientes
Puede que hayas invertido mucho dinero en la decoración de tu establecimiento, en unos preciosos muebles de diseño, en una sofisticada iluminación, en pagar un alquiler carísimo en la calle más céntrica de tu ciudad… Pues bien, déjame decirte que un negocio peor que el tuyo, pero con una buena web lucirá mucho más a los ojos de quien no os conozca.
Porque si alguien que esté buscando, por ejemplo, una peluquería, encuentra en internet 5 próximas, y descubre que la web de una de ellas le fascina, otras dos son feas y anticuadas y las otras dos no tienen web… existen muchas posibilidades de que elija la primera. Y eso no implica que sea la que mejor servicio da, sino la que mejor servicio APARENTA DAR.
Mira este ejemplo de Madrid Warriors una web que desarrollé recientemente. Se trata de un gimnasio, un negocio local por excelencia y en este caso, más local aún, pues la mayoría de sus clientes vienen de una zona muy concreta de Madrid. Pues bien, se creó una imagen muy directa y atractiva de sus servicios, para que sus potenciales clientes les encontraran fácilmente en Google y una vez que llegaran a su web vieran de forma muy clara y sencilla qué podían conseguir, cómo era el centro, dónde estaba y cómo podían contactar con él… y ha sido todo un éxito.
#3 – Tu negocio estará abierto 365/24/7
Esto es algo que muchos de vosotros habéis aprendido de golpe y porrazo en 2020. Hasta entonces la rutina era levantar la trapa todas las mañanas y cerrarla todas las noches; los clientes podían entrar o no, pero vuestra tienda ahí estaba, siempre abierta y a su disposición.
Pero de golpe llegó la COVID-19 y los confinamientos y todos nos dimos cuenta de que eso que dábamos por supuesto, no lo era tanto. De que los negocios podían tirarse cerrados semanas o meses y que, sobre todo en los negocios locales, eso les suponía que no entraba ni un céntimo en la caja.
¿Qué ocurrió entonces? Que los negocios que sí tenían web, pudieron seguir su actividad, de forma limitada, pero sin cerrar. Los restaurantes podían atender pedidos y hacer entregas a domicilio; los servicios médicos, podían atender consultas vía online; los profesores particulares, podían seguir impartiendo sus clases por internet; los abogados podían seguir atendiendo consultas y captando clientes a través de su web.
Sí, ya sé, puede que me digas «Soy tendero y durante todo este tiempo me siguieron pidiendo fruta por teléfono sin problemas, yo no necesito una web». Vale, pero, ¿a cuántos de tus clientes les ocasionó eso la molestia de tener que llamarte varias veces porque comunicabas, de tenerte que preguntar el precio de cada producto (con la pérdida de tiempo que eso supuso para ti? Con una web en la que tuvieras tu catálogo de productos actualizado y un formulario de contacto, hubieras evitado todas esas molestias.
Y piensa que esto es algo que ha llegado para quedarse. La gente ha descubierto lo cómodo que es pedir comida, hacer la compra, reservar cita…. por internet, y va a seguir haciéndolo cuando todo esto acabe, así que este es el momento de ponerte las pilas… o de atenerte a las consecuencias.
#4 – Podrás ampliar tu mercado a otras localidades
Una vez que tu negocio tenga una web, ya no estás limitado a vender a los habitantes de tu ciudad. Tu web puede verse por cualquiera en el mundo y tu potencial cartera de clientes puede crecer hasta el infinito.
Voy a ponerte un ejemplo muy cercano: el mío. Yo vivo en Zamora y mi negocio está asentado aquí. Podía haberme dedicado a buscar clientes locales a través del boca a boca o de interminables acciones comerciales. Pero no, lo tuve claro desde el principio, mi ámbito de aplicación podía ser todo el mundo y en la actualidad, gestionando todo el negocio a través de esta web, casi ninguno de mis clientes son empresas locales; mis clientes están en Madrid, Barcelona, Valencia, Dubai, Australia…
¿Quieres otro ejemplo? Ok. Una de mis clientas, la Doctora Pérez Sevilla es una prestigiosa cirujana y médico estético. Tiene su consulta en Madrid y eso supone que tiene mucha visibilidad; pero no se quedó ahí; me pidió que le creara una web y ahora no solo tiene clientes madrileños, sino pacientes de toda España que acuden a su consulta porque la han descubierto a través de su web. No solo eso, durante el confinamiento lanzó su servicio de consulta online a través de la web, que tuvo un gran éxito, lo mismo que en las navidades sus cheques regalo.
#5 – Desde el punto de vista económico, tu negocio local necesita una web
Efectivamente, porque por un lado te ahorrarás dinero y por otro ganarás más… Lo que viene a ser un WIN WIN.
¿Cómo… que ahorraré dinero? Pues sí y la razón es muy simple. Si utilizas intensivamente tu web para la gestión de negocio local, su ubicación física pasará a ser algo secundario y eso te puede suponer un ahorro considerable en el alquiler de tu local, la gran carga que tienen que asumir mes a mes los propietarios de negocios locales.
De una calle principal a una secundaria (aun bien situada) la diferencia puede ser de más de un 50% y si es la gente la que va a ti porque te conocen a través de la web… ¿para que necesitas estar en la calle principal?
Y… ¿ganaré más dinero? Pues sí, si lo haces bien, claro. Una web bien llevada, bien estructurada y desarrollada dentro de una estrategia bien planificada, va a llevar clientes a tu tienda (física o digital), pues incrementará tanto tus ventas locales como las de fuera. Eso sí, si creas una chapuza, desarrollada de cualquier forma y con una estética desastrosa, posiblemente consigas el efecto contrario.
¿Qué tipo de negocios locales necesitan una web?
Te seré breve: TODOS
Y dejemos claro que cuando digo que un negocio local necesita una web, no solo estoy hablando de una mercería, un bar o un restaurante; no. Un negocio local es cualquiera con un establecimiento abierto al público, y una web puede aportar cosas a todos y cada uno de ellos.
Os hago una breve lista a continuación con los usos que podrían darle algunos colectivos:
- Abogados: resolución de consultas online dentro y fuera de la ciudad, captación de nuevos clientes, agilización de las comunicaciones con clientes…
- Médicos: resolución de consultas online, gestión de agenda, publicaciones de artículos clínicos y promoción de su actividad, comunicación con clientes…
- Asesores fiscales: recepción y entrega de documentación con sus clientes, información de procedimientos o trámites, resolución de consultas…
- Arquitectos: portfolio de sus proyectos, información sobre forma de trabajo, comunicación con clientes…
- Entrenadores personales: gestión de clientes, agenda de entrenamientos, entrenamientos virtuales, materiales complementarios…
- Gimnasios: gestión de clientes, información sobre el centro y profesores, agenda de actividades, clases online…
- Talleres mecánicos: información de servicios, instalaciones, compraventa de vehículos, comunicación con clientes, gestión de citas…
- Reformas y reparaciones de viviendas: servicios de pequeña contrata de obras, albañilería, fontanería, pintura, carpintería…
- Tiendas de alimentación: catálogo de productos, comunicación con clientes, entregas a domicilio
- Restauración: carta digital, pedidos online, fidelización de clientes, captación de nuevos clientes…
- Servicios médicos y estéticos: muestrario de servicios, gestión de agenda de citas…
- Y así podría seguir hasta mañana…
Ya, pero es que…
Vamos con las objeciones más frecuentes que nos plantean los comerciantes locales sobre tener una web:
No vendo productos online ¿Para qué mi negocio local necesita una web?
Permíteme que te responda con otra pregunta… ¿Y cómo es que aún no vendes productos online pudiendo hacerlo con unos esfuerzos e inversión bastante asumibles?
No hace mucho, hablando con el propietario de una tienda delicatessen local, les pregunté que por qué no tenían una web, si su principal fuente de ingresos eran los turistas. «¿No os interesaría seguirles vendiendo en el futuro ese vino que han comprado hoy y que tanto les ha gustado?».
Su respuesta me dejó de piedra: «No, sí a los turistas les vendemos si nos lo piden. Les damos nuestra tarjeta con nuestra dirección y cuando quieren algo nos llaman, les hacemos el pedido, se lo llevamos a Correos y se lo enviamos». Ya, les dije «pero ¿No sería mejor que tuvierais una tienda online en la que ellos pudieran entrar cualquier día y a cualquier hora a comprar lo que quisieran, en la que pudierais aplicar cupones de fidelización y en la que tener automatizado un proceso de envío?» ¡¡NO SE LES HABÍA OCURRIDO!!
Esta objeción nos la hacían hace un año muy a menudo los propietarios de bares y restaurantes… ¿Y qué ha ocurrido? Que quien ha funcionado a través de una web, ha podido más o menos ir tirando con el servicio a domicilio dentro de su ciudad.
A nuestros clientes les gusta el trato personal
Es comprensible que muchos de los clientes locales valoren y aprecien el trato personal. Tampoco a mí me gusta estar con mascarilla y apartado de la gente y cuando termine la pandemia volveré a charlar y a abrazar a la gente igual que antes, pero mientras tanto, la videoconferencia es lo que hay… he tenido que adaptarme.
Y esto ha llegado para quedarse. Tus clientes locales seguirán pasando por tu tienda, pero si les facilitas hacer cosas a través de tu web, seguramente que te lo agradezcan.
Y no solo eso, si tu ciudad es de las que depende de las visitas turísticas, ese trato personal con los clientes de fuera de tu ciudad va a venir siempre precedido de una búsqueda en internet en la que tener una web o no va a ser decisivo.
No sé manejar el ordenador, ¿cómo voy a mantener una web?
Un ordenador puede que no, pero seguramente el teléfono móvil sí que lo usas y mucho. Y eso es todo lo que necesitas: enviar y recibir correos electrónicos o contestar a llamadas telefónicas o whatsapp.
Además, permíteme que te haga una pregunta. Si no dominas la mecánica, ¿por qué tienes un coche?, ¿cómo lo mantienes? Cuando tienes una avería o necesitas mantenimiento, cambios de aceite o ruedas, ¿qué haces? Lo llevas al Servicio Técnico o a tu mecánico de confianza ¿verdad?
Pues esto es igual, todas estas tareas puedes encargárselas a un experto, como es tu desarrollador web, que puede ocuparse del mantenimiento, los cambios y las actualizaciones, que generalmente son simples y asequibles.
Me han dicho que una página web es cara
Eso lo has dicho tú, no yo…
Ante todo, tienes que plantearte que desarrollar una página web para tu negocio no es un gasto, es una inversión.
En efecto, es una inversión en tu negocio, lo mismo que las sillas y las mesas de tu restaurante, el ordenador de la recepción de tu consulta o la alarma de tu establecimiento, y como tal puedes desgravártelo en Hacienda.
Y en segundo lugar… ¿Qué es caro o barato? Nos hemos encontrado con propietarios de bares a quienes una web estupenda por 1.000 € les parecía cara y sin embargo no habían dudado en pagar 500 € por cada taburete de su establecimiento. Os puedo asegurar que la inversión de la web la iban a multiplicar por 50, algo que dudo que los taburetes fueran a hacer… como su competencia les demostró enseguida.
Obviamente el precio de una web va relacionado con la complejidad de la misma y las funcionalidades de la misma. No podemos cobrar lo mismo por una web simple, con 6 páginas y unas cuantas imágenes y textos que por una web con 25 páginas, con tiendas integradas, gestión de eventos, pero incluso en caso de estas megawebs, el precio no es desorbitado.
Bueno, pues espero que llegado leyendo hasta aquí, lo que te agradezco, pues significa que te tomas en serio el momento en el que estamos y el desarrollo de tu negocio. Si tienes alguna duda o consulta o directamente quieres que hablemos sobre la web de tu negocio local, escríbeme.
¡Gracias!