Atrás quedaron los tiempos en que los abogados repartían tarjetas de visita o recababan sus contactos por el boca a boca. Hoy día las web de abogados son necesarias y en este artículo te cuento las razones para ello.
Empecemos diciendo que yo soy abogado y, aunque ahora no ejerzo, conozco en carnes propias los rigores y sinsabores de la profesión y sé las necesidades digitales que puede tener un abogado en estos tiempos.
No solo eso, a menudo recibo preguntas y consultas de compañeros al respecto, incidiendo sobre todo en un aspecto: ¿Cómo una web de abogados me puede ayudar a tener más clientes? Tranquilos, en este post os lo contaré 😉
¿Cómo afecta la era digital a los abogados?
Actualmente estamos en plena era digital y existe otro mundo al lado del real, el mundo online, que, al igual que ocurría en la película Matrix, tiene su repercusión en el real
En realidad, el mundo online es igual que tu pueblo o tu ciudad, solo que infinitamente más grande y, por tanto, con muchísimas más posibilidades de encontrar clientes, colaboraciones e información, aunque también con muchas más dificultades para destacar o conocer gente y hacer que te conozcan.
Por otro lado, hoy todos vivimos inmersos en ese mundo digital; todos estamos permanentemente conectados a Internet a través de nuestros dispositivos móviles y estamos acostumbrados a obtener la información o recursos que necesitamos inmediatamente y en el lugar en el que estemos.
Ello implica varias consecuencias:
- Internet no solo te permite tener clientes en tu ciudad, ¡te permite tener clientes en toda España o en todo el mundo (dependiendo de tu ámbito de actividad).
- La red te permite que tu oficina esté abierta las 24 horas del día, aunque tú no estés en ella (una web siempre está activa).
- Cuentas con millones de usuarios que ya tienen tus datos de contacto en su teléfono y que pueden encontrarlos simplemente buscando en Google.
En el mundo online, cuando la gente quiere algo, pregunta al señor Google y este, amablemente le muestra todos los escaparates que contienen algo relacionado con su búsqueda. Pues bien, para poder aparecer en esa búsqueda necesitas precisamente disponer de ese escaparate llamado página web.
Y volviendo a la pregunta del millón: «¿Una web de abogados va a hacer que gane más dinero?», la respuesta es muy simple… desde luego no va a hacer que ganes MENOS dinero y desde luego hoy día, si no estás en Internet (y no estás adecuadamente), tienes una seria desventaja respecto a aquellos de tus competidores que sí están y que lo están haciendo bien.
Razones por las que las páginas web de abogados son necesarias
Son muchas las razones que aconsejan las páginas web de abogados, sobre todo para un abogado del siglo XXI, que quiere vivir en su tiempo y está concienciado con cómo piensan y actúan sus clientes; de hecho, no son muy distintas de las que tiene cualquier empresa, pero lo que sí es cierto es que en este ámbito las necesidades son específicas.
#1. Un abogado del siglo XXI vive y trabaja… en el siglo XXI
Aún me echo las manos a la cabeza cuando veo a alguien repartiendo tarjetas de visita entre sus conocidos o contactos; tarjetas que en muchos de los casos tienen bastantes años y, a menudo, datos corregidos con Tipex o directamente un tachón de bolígrafo.
Cuando se acaban, o si hay más presupuesto, se puede volver a hacer una remesa corregida pero contéstame… ¿Dónde van a parar esas tarjetas? Sí, exacto, en el mejor de los casos a un tarjetero con otras mil, que nunca encuentras cuando las necesitas… pero lo más frecuente es que tras un mortal y tres tirabuzones vayan a parar a la papelera… y con ellas el dinero que han costado y, lo más importante de todo, la información que contienen.
¿Para qué vas a conservar hoy 500 tarjetas, cuando tienes toda la información en Internet? ¿No te acuerdas del número o la dirección del abogado? Simple, sacas el móvil y tecleas o le dices al micrófono que te busque esa información y VOILA… ahí tienes al abogado que estabas buscando. Simple, rápido, limpio y en un solo dispositivo.
En el caso de un abogado, independientemente de otras funcionalidades, la primera razón para tener una web es que es una tarjeta de visita digital y diseñada a tu gusto. No solo se puede acceder a ella con un clic desde cualquier dispositivo, sino que contiene muchísima información sobre lo que haces y cómo lo haces y, lo más importante de todo… puede estar siempre actualizada.
Uno de nuestros clientes de Madrid cambió su consulta hace unos días. En su página de contacto no solo aparecen la dirección o teléfono, sino también itinerarios desde el aeropuerto o estaciones hasta la consulta, parkings cercanos, etc. Nos llamó para notificarlo y en 15 minutos estaba actualizada toda la información a los nuevos datos.
#2. Con una web de abogados, puedes tomar las riendas de tu apariencia en las búsquedas de Google
Siguiendo con el apartado anterior, reflexiona un momento: cuando buscas información sobre un negocio o profesional… ¿Dónde vas? ¿Lo buscas en las redes sociales? ¡Noo, qué va! Acudes a Google (o a cualquier otro buscador de Internet) y le pides que te proporcione información (“abogado en madrid” “separación mutuo acuerdo» «acciones banco popular»…). Actualmente, más del 80% de los consumidores realizan investigaciones en Google antes de hacer una compra.
Y esto afecta a los abogados por dos lados.
- Por una parte, a nivel informativo. Si escribes artículos con información relevante sobre tu ámbito de actividad o noticias jurídicas de interés, poco a poco, te convertirás en un referente para compañeros del sector (que acudirán a ti cuando busquen información sobre ese asunto) y con clientes, que siempre están ávidos de información sobre los problemas que les afectan.
- Por otra parte, a nivel comercial. Más reputación y más búsquedas, se traducen en más clientes. Ahora ya no dependes de amigos para que te recomienden, si trabajas bien, tus propios clientes serán tus mejores embajadores a través de la red.
Ahora realiza un sencillo ejercicio que siempre recomiendo a mis posibles clientes cuando acuden a mí. Aparca esta lectura por un momento y busca tu nombre en Google. ¿Cuáles son los primeros resultados que aparecen?
Déjame que lo adivine… Si no tienes página web, lo más normal es que aparezca el enlace a tu ficha en algún directorio profesional tipo Legalia, 20 minutos, páginas amarillas o similares (si tienes página web y estos enlaces aparecen antes…entonces sí que necesitas ayuda con urgencia, porque no lo estás haciendo nada bien).
Si no estás en estos directorios, es posible que aparezca el enlace a tu página de Facebook o a alguna de tus redes sociales. Y si te has dado de alta en el servicio, tal vez aparezca tu ficha en Google My Business, con las reseñas que han dejado allí tus clientes (o quienes dicen serlo).
Ahora piensa… ¿Es eso lo primero que quieres que sepan de ti todos los que te están buscando en Google? ¿Es esa la imagen pública y, sobre todo, la imagen profesional que quieres proyectar? ¿Unos simples datos de contacto? ¿La crítica (puede que injustificada) de un cliente o de quien ni siquiera lo es?
Cuando tienes tu propia web, puedes tomar las riendas de tu relevancia en el buscador. No te podemos asegurar, ni nadie puede garantizártelo, que vas a estar en el número 1 de las búsquedas, pero es muy probable que si tu dominio (el nombre de la web) incluye tu nombre, en poco tiempo estarás en los primeros lugares y tendrás la capacidad de decidir qué muestras a quien busca información sobre ti y tu carrera.
#3. Imagen, imagen… e imagen
Dicen que no hay una segunda oportunidad para causar una primera buena impresión… y es cierto. Tu página web debe dar de ti una impresión positiva y duradera.
Si quien te encuentra a través del buscador, se lleva una primera mala impresión con lo que ve, ya empiezas el partido perdiendo 1 a 0.
Seguro que vistes habitualmente un vestido o traje de chaqueta si eres mujer o traje y corbata si eres hombre. ¿Por qué? Seguramente vas más cómodo en vaqueros y deportivas ¿no? Exacto, lo haces por imagen, porque quieres transmitir a tus clientes una imagen de distinción, de seriedad, de elegancia, de limpieza y de respeto mutuo. No solo eso, el uso habitual de esta vestimenta, ha generado expectativas en los clientes, que se extrañan si no te ven bien vestido.
¿Y cómo consigue eso un abogado del siglo XXI trabajando desde casa? Simple, con una página web de abogados bonita y elegante, que desde el primer vistazo muestre esos mismos valores de elegancia, distinción, y prestigio, pero que a la vez muestre cómo eres y cómo puedes ayudar a quien te esté buscando.
Mirad esta web que desarrollamos para un bufete de Madrid. Rompe un poco el estándar de seriedad de las webs de abogados, dado que son un equipo muy dinámico dedicado al derecho deportivo, pero no por ello se aleja de los valores que os he expuesto. Elegancia, profesionalidad y distinción por todos lados.
Cuando alguien busca información sobre ti, lo que quiere es encontrar una web que se la proporcione… pero no solo eso, también busca credibilidad e imagen, busca un motivo que le haga elegirte a tí en vez de a tu competencia y es posible que rechace contratar contigo si a primera vista la web no refleja el tipo de experiencia que el cliente quiere obtener.
Por tanto, tu empresa necesita una web, pero no una cualquiera: necesita una web profesional. Tu web transmitirá a quienes busquen tu negocio confianza en tí, en que estás aquí y en que te quedarás mucho tiempo.
Y en todo caso, ten claro que si tu no tienes una web y tu competencia sí, es muy probable que les elijan a ellos.
#4. Puedes comercializarte a través de tu página web
Sí, todo muy bonito, pero volvemos a la casilla de salida… ¿Voy a tener más clientes o ganar más dinero si tengo una web?
De entrada vas a tener muchas más oportunidades de hacerlo. Ahora, muy posiblemente tus clientes procedan de un área geográfica determinada (ciudad, provincia) o de un sector determinado (banca, seguros, autónomos…).
Una buena web de abogados, unida a una estrategia de desarrollo de contenidos para la misma, van a hacer que llegues a mucha más gente, a gente que ni siquiera conoces, gente que no será de tu sector, de tu provincia o incluso de tu país, pero que te descubrirá, verá lo que sabes, cómo puedes arreglar sus problemas y es muy posible que acuda a ti.
Te pongo un ejemplo. Si eres una persona que vives en Madrid y tienes un problema con las preferentes buscarás un abogado que te lo solucione, pero en una ciudad tan grande puede que no conozcas nadie especializado. Buscas en Google «abogado preferentes madrid» y así de primeras te salen varios… elige uno de ellos al azar y como puedes ver, en su web explican con todo lujo de detalles, quiénes son, cómo consiguen recuperar el dinero de sus clientes, qué porcentaje de casos han ganado y un montón de información adicional. ¿Le elegirás a él? Puede que sí o puede que no, pero esto es un asunto de porcentajes y si esa página la ven 100 personas interesadas, casi seguro que 30-40 les van a llamar.
Mira a tu alrededor, seguro que algún compañero se ha quedado con un asunto que era perfecto para ti “porque se ha vendido mejor” o “tenía muchos contactos”… eso, amigos, es promoción y marketing y hoy día para conseguir eso, nada mejor que una página web.
Pero una web no sirve solo para que te encuentren, también es un despacho virtual desde el que poder atender a esas personas interesadas. Una web te permitirá cosas como:
- Exponer de forma detallada tu catálogo de servicios y experiencia profesional
- Recibir mensajes y consultas de personas interesadas en tus servicios.
- Establecer un sistema de citas para tus clientes.
- Crear un servicio de consultas online, con cobro automático y por adelantado.
- Impartir talleres y cursos formativos sobre materias de tu conocimiento.
Y lo mejor de todo es que tienes a tu cliente en su casa, con la tarjeta de crédito en la mano preparado para comprar… y que puedes hacer que te paguen por anticipado.
#5. Tu despacho está abierto 24 horas al día, 7 días a la semana… y te permite conciliar
Actualmente, un abogado no necesita pasarse 10 horas al día esperando que entren sus clientes. Una de las razones más evidentes por las que un abogado necesita una web es la comodidad. Si dispones de una web de abogados, tienes tu bufete funcionando a todas horas… y no tienes que estar atado a una silla.
Y si además tienes familia de la que ocuparte, una web profesional te permitirá gestionar muchas más cosas desde tu casa y dedicarle a los tuyos ese tiempo que se merecen. La pandemia nos ha obligado a familiarizarnos con muchas cosas nuevas a marchas forzadas y una de ellas ha sido el teletrabajo. Hace muy poco, te costaba asimilar que podías gestionar tu negocio desde casa… hoy es una necesidad.
Con los estilos de vida que hay hoy día, cada vez hay más negocios “24 horas”, pues bien, una web es uno de ellos. Tus clientes, pueden contactar contigo por mail a cualquier hora y desde cualquier lugar y tú responderles cuando puedas. Ya no es necesario que estés pegado a un teléfono.
No solo eso, si pones en marcha un servicio de consultas online, ¡puedes vender incluso cuando estás durmiendo!
#6. Puedes competir con los grandes
Es muy posible que pienses que tu pequeño despacho no puede luchar contra los grandes bufetes, que Garriges, Cuatrecasas o Uría Menéndez son Olimpos inalcanzables…pero te equivocas (si tienes una web, claro).
Hoy día los abogados cuentan con una herramienta muy poderosa, que es Internet. La red de redes es una calle por la que pasa todo el mundo y tu web es como un negocio que abres con ella. Allí estarás tú y sí, también estarán las grandes marcas…pero la diferencia con ellas es mucho menor que en el mundo real.
En la vida real ellos tienen mejores oficinas y mejor situadas. En Internet, tu web de abogados puede lucir igual de maravillosa que la suya. Nosotros desarrollamos webs para negocios pequeños y medianos y su apariencia es igual que las de las grandes empresas.
¿Que un gran bufete ofrece sus servicios en múltiples áreas y países? Tu puedes tener menos servicios, pero mejor prestados y aportar, además, el valor añadido de la especialización, la calidad, el trato personalizado y la confianza.
En Internet no se trata de ver quién tiene el edificio más grande, sino de quien lo tiene mejor construido y de quien consigue que sus visitantes estén más cómodos y encuentren lo que están buscando..
Ya, pero es que una página web diseñada por un profesional es cara…
Eso lo has dicho (o lo has pensado) tú, no yo…
Con la llegada de los CMS como WordPress, hoy día el coste de una web profesional ha bajado mucho, y por menos de lo que te piensas, puedes tener una web buena, muy atractiva visualmente y muy efectiva.
Obviamente el precio irá relacionado con la complejidad de la web y las funcionalidades de la misma. No podemos cobrar lo mismo por una web simple, con 6 páginas y unas cuantas imágenes y textos que por una web con 25 páginas, con tiendas integradas, gestión de eventos, pero incluso en caso de estas megawebs, el precio no es desorbitado.
En el siguiente enlace puedes ver con detalle cómo son las páginas web para abogados que desarrollamos nosotros y comprobar cómo hacemos las cosas.
Te gustan ¿verdad? Pues el desarrollo de ninguna de esas webs ha superado los 2.500 €. Ahora piensa… si el hecho de tener una web de abogados, hace que consigas tener 2 clientes más al año (que ya es poco pedir), ya habrás rentabilizado sus costes, ¡en el primer año!
La pelota está ahora en tu tejado ¿Quiéres seguir siendo un abogado del siglo XX o prefieres ser un abogado del siglo XXI?