Tu empresa necesita una web profesional. Así de claro y de rotundo. Quizás tú aún no seas consciente (o no quieras ser consciente de ello), pero las cosas son así.
Las grandes empresas tienen esto muy claro desde hace muchos años, pero aún hay una enorme cantidad de pequeños empresarios y autónomos que creen que esto no va con ellos.
En nuestro día a día vemos muchos casos de empresas que en materia digital siguen la “táctica del avestruz”, esconden la cabeza bajo tierra y no se dan por aludidos cuando se trata de digitalizar su empresa, amparándose en excusas sin fundamento falsos mitos.
Señoras y señores…estamos en el siglo XXI y hoy día, si no estás en Internet (y no estás adecuadamente), tienes una seria desventaja respecto a aquellos de tus competidores que sí que lo están haciendo bien.
Sí, definitivamente tu empresa necesita una web profesional… y si aún no lo tienes claro, aquí te vamos a dar un montón de razones para intentar convencerte.
8 Razones por las que tu empresa necesita una web profesional
Como os he dicho son muchas las razones por las que tu empresa necesita página web, pero voy a resumirlas en estas ocho:
#1. Debes estar donde están tus clientes
Como decía antes, estamos en el siglo XXI, una época en que la gente va a todas partes con un móvil en la mano, un aparatito que lo sabe todo.
Se acabaron los tiempos en que el boca a boca local era el que llevaba a la gente a tu negocio. Hoy día el mecanismo es el mismo, pero es digital y se llama redes sociales, marketplace y similares.
Piensa un poco, si por ejemplo vas a pasar unos días a París, seguramente antes de ir, ya hayas planificado tu visita y sepas horarios de visitas y museos, cómo desplazarte, qué comer y dónde. Cada vez hacemos menos cosas a ciegas; cuando vamos a un restaurante, antes miramos las reseñas y, si tiene web, consultamos su carta, precios, instalaciones, etc.
No solo eso, compramos productos y servicios por internet, reservamos entradas o restaurantes por internet…
Y además ten en cuenta que estamos en un mundo globalizado. Tus clientes ya no están solo en tu ciudad, ahora pueden estar en cualquier lugar del mundo…y la vía de comunicación es tu web.
#2. Las redes sociales no son suficientes
Si eres un autónomo o propietario de una pequeña empresa, quizás puedes pensar que una web no te aporta ningún beneficio cuando puedes hacerlo todo en las redes sociales.
Hoy día es de lo más frecuente encontrarse con empresas que cuentan con una página en Facebook como sede digital de su negocio…¡Y piensan que eso es suficiente!
A ver… vamos por partes. Las redes sociales son un excelente medio COMPLEMENTARIO a una web, pero nunca un medio SUSTITUTIVO de una web profesional.
Facebook, Twitter, Instagram, Linkedin, Pinterest… son una excelente vía para compartir tus novedades, artículos consejos…pero únicamente con la finalidad de que lleguen a tu web y allí poder mostrarles lo que quieras de tu empresa o venderles más servicios.
Tu web es tuya y lo mismo ocurre con los contenidos que subas a ella. En cambio, lo que subas a las redes, pasa a pertenecer a estas. ¿Lo sabías? Pues es así: tus fotos, tus contenidos… lo que se cuelga en las redes, puede desaparecer sin previo aviso; sin embargo tú eres quien maneja tu web y todo lo que quieres que esté en ella, ahí estará siempre.
Por otra parte, lo que tú compartes en redes sociales solo llega a una parte muy pequeña de tus seguidores, en cambio, lo que compartas a través de tu web, puedes moverlo a través de múltiples canales: newsletters, grupos de whatsapp, foros, otras webs…. y hacerlo llegar a la audiencia deseada.
#3. Controlas a Google
Siguiendo con el apartado anterior, reflexiona un momento: cuando buscas información sobre un negocio o profesional… ¿Dónde vas? ¿Lo buscas en las redes sociales? ¡Noo, qué va! Acudes a Google (o a cualquier otro buscador de Internet) y le pides que te proporcione información (“abogado en madrid” “mejores hamburguesas valencia”…). Actualmente, más del 80% de los consumidores realizan investigaciones en Google antes de hacer una compra.
Ahora realiza un sencillo ejercicio. Si no tienes página web, aparca esta lectura por un momento y busca tu nombre en Google. ¿Cuáles son los primeros resultados que aparecen?
Déjame que lo adivine… Es muy posible que aparezca el link a tu página de Facebook o a alguna de tus redes sociales. Tal vez aparezca tu ficha en Google My Business, o las reseñas que hayan dejado tus clientes en marketplace como TripAdvisor, el Tenedor, Atrápalo, Habitissimo, etc.
Ahora reflexiona… ¿Es eso lo primero que quieres que sepan de ti todos los que te están buscando en Google? ¿Es esa la imagen pública y, sobre todo, la imagen profesional que quieres proyectar? ¿La crítica (posiblemente injustificada) de un cliente?
Cuando tienes tu propia web (sobre todo, cuando te la diseña alguien como nosotros con experiencia en SEO), puedes tomar las riendas de tu relevancia en el buscador. No te podemos asegurar, ni nadie puede garantizártelo, que vas a estar en el número 1 de las búsquedas, pero es muy probable que si tu dominio (el nombre de la web) incluye tu nombre, en poco tiempo estarás en los primeros lugares y tendrás la capacidad de decidir qué muestras a quien busca información sobre ti y tu carrera.
#4. Controlas tu reputación y la primera impresión del público
Tú debes controlar la primera impresión de quien te conoce, a través de tu web. Tu página debe dar de ti una impresión positiva y duradera.
Y sobre todo, debe darla al primer vistazo. Posicionar bien tu web en Google, hará que la gente llegue a ella, pero eso no servirá de nada si la web tiene un diseño desastroso o, sin llegar a ello, no transmite una imagen adecuada y atractiva de tu empresa.
Cuando alguien busca información sobre tí, lo que quiere es encontrar una web que se la proporcione… pero no solo eso, también busca credibilidad e imagen, busca un motivo que le haga elegirte a tí en vez de a tu competencia y es posible que rechace contratar contigo si a primera vista la web no refleja el tipo de experiencia que el cliente quiere obtener.
Hace años era muy frecuente que las empresas se esmeraran en la confección de sus tarjetas de visita. Hoy en día, lo siguen haciendo, pero cada vez se dan más cuenta de que la mejor tarjeta de visita es una buena web. Puedes meter el mejor contenido e imágenes de tu empresa, puedes tenerlos actualizados con cualquier cambio que se produzca y lo mejor de todo… puedes hacer que contacten contigo desde la propia web ¿Qué tarjeta de visita permite eso?
Mira, por ejemplo, esta que hemos creado para una tienda de muebles. Es muy sencilla, pero cumple su función perfectamente.
Por tanto, tu empresa necesita una web, pero no una cualquiera: necesita una web profesional. Tu web transmitirá a quienes busquen tu negocio confianza en tí, en que estás aquí y en que te quedarás mucho tiempo.
Y en todo caso, ten claro que si tu no tienes una web y tu competencia sí, es muy probable que les elijan a ellos.
#5. Tienes tu catálogo y tu dossier informativo siempre en línea
¿Cuánto dinero has gastado en hacer dossieres informativos, catálogos de productos, flyers…? Eso ya no es necesario, ahora tus clientes buscarán toda esa información en tu web.
Una de las principales por las que una empresa necesita una web es para mostrar quién es, qué hace, dónde está… En la web puede mostrar toda la información sobre la empresa, un portfolio con todos sus trabajos (aquí, por ejemplo, tienes el nuestro)
Además, una web te permite actualizar continuamente tus productos. ¿Qué ocurre cuando necesitas cambiar tu catálogo en papel? Exacto, que tienes que tirar todos los antiguos, porque la información ha quedado obsoleta. Piensa ¿cuánto te cuesta esto?
Pero es que, además, una web te permite insertar contenidos imposibles de ver en un catálogo o folleto en papel: vídeos de YouTube, podcast, webinars, libros electrónicos…y por su puesto integrar todas las redes sociales animando a tu audiencia a compartir.
#6. Tu empresa necesita una web para estar abierta 24 horas al día, 7 días a la semana
Una de las razones más evidentes por las que una empresa necesita una web es la comodidad. Si dispones de una web, tienes un escaparate funcionando a todas horas.
Con los estilos de vida que hay hoy día, cada vez hay más negocios “24 horas”, pues bien, una web es uno de ellos. Tus clientes, pueden contactar contigo por mail a cualquier hora y desde cualquier lugar y tú responderles cuando puedas. Ya no es necesario que estés pegado a un teléfono.
Imagina ahora que tienes una tienda online, ¡puedes vender incluso cuando estás durmiendo!
#7. Tus clientes pueden contactar contigo y puedes almacenar sus datos para futuras acciones comerciales
Con tu propia web tienes un fantástico canal de contacto con tus clientes, para que estos te hagan consultas o pedidos.
Además, puedes recoger sus direcciones de correo electrónico y, con esa base de datos, enviarles ofertas, información con contenido de valor (eso sí, respetando siempre la normativa en materia de protección de datos).
Una web propia, te permite también utilizarla como servicio de atención al cliente a través de tickets, como hoy día tienen cientos de empresas o, simplemente, a través de una sección de FAQ o Preguntas Frecuentes.
Y, por supuesto, al disponer de un dominio propio, puedes enviar tus correos desde una dirección electrónica tipo info@nombredetunegocio.com (porque, seamos sinceros, a nivel comercial, eso de pepitogrillo258712@gmail.com como que no queda muy bien ????
#8. Puedes competir con los grandes
Quizás pienses que con tu pequeño negocio es imposible luchar contra las grandes empresas…pero te equivocas (si tienes una web, claro).
Internet es una calle por la que pasa todo el mundo y tu web es como un negocio que abres con ella. Allí estarás tú y sí, también estarán las grandes marcas…pero la diferencia con ellas es mucho menor que en el mundo real.
De acuerdo, ellas tienen grandes webs y tiendas online pero por un precio bastante asequible tu empresa puede tener en la web servicios similares y una vez ahí, podrás explotar tus ventajas frente a ellos.
¿Que una gran empresa tiene cientos de productos? Tu puedes tener menos, pero mejor hechos y darle a tus servicios el valor añadido de la calidad, el trato personalizado y la confianza.
En internet no se trata de ver quién tiene el edificio más grande, si de quien lo tiene mejor construido y de quien consigue que sus visitantes estén más cómodos.
Sí, tu empresa necesita una web profesional… y lo sabes. ¿Quieres que hablemos sobre ello? ¡¡Escríbenos!! ????
¡¡Gracias!!
1 comentario